Soy sincera, responsable y leal. Creo en las personas y en todo su potencial, valoro el espíritu de superación y la responsabilidad que estas asumen frente al rol que les toca vivir. Agradezco a Dios por haber puesto en mi camino al hombre con el que comparto mi vida y por haber permitido desarrollarme como madre de dos hijos. Educadora por convicción y profesión. Me siento orgullosa y feliz de ser maestra.

Vivir acorde con los principios señalados en el evangelio para ser una influencia positiva para mi familia y los que se encuentran a mi alrededor. Formarme y ayudar a formar a mi familia y alumnos para que puedan autorealizarse y poder trascender como hijos de Dios.

Seguir mejorando mis habilidades personales y profesionales para crecer como persona. Ver a mis hijos alcanzando sus metas personales. Y al final de mis días poder presentarme delante de Dios y decirle me diste 5 y hoy te ofrezco 10.