Soy un ser humano perseverante, leal, fiel a mis principios y valores, los cuales me fueron inculcados con el ejemplo de mis padres, quienes a pesar de las vicisitudes de la vida hicieron de mi infancia un remanso de felicidad. Valoro mucho mi familia, me fascina nuestra cultura, nuestro patrimonio nacional, por ello viajamos cada año para conocer un nuevo destino turístico de nuestro querido Perú. En el año 2003 con el entusiasmo y la ilusión de una mejor calidad educativa me embarque en mi proyecto personal de una Escuela diferente, que privilegie a los niños y niñas en toda sus dimensiones y no solo la cognoscitiva, el cual vio la luz el 24 de setiembre del 2004 y al que denominé Fray Martin de Porres, en honor a nuestro Santo Limeño del cual soy devota. Aspiro con ello contribuir en la mejora de la calidad de la educación, que posibilite una formación integral de nuestros niños y niñas para que sean capaces de afrontar los retos de este nuevo siglo.

Mi razón de existir en esta vida es mi familia con quienes comparto hoy mi mayor tiempo, mi trabajo es un medio de disfrute personal , más que económico. Trabajo para hacer de mi institución educativa un lugar en donde mis niños y niñas se sientan a gusto y les permita desarrollarse en todos los ámbitos de su esfera humana, que les permita soñar y descubrir su verdadera vocación para ser mañana más tarde hombres y mujeres de bien.

Mi sueño es esta vida es: En el corto plazo guiar a mis hijos, seguir alentándolos y apoyándolos para que sigan creciendo como seres humanos valiosos e importantes. En lo personal culminar satisfactoriamente el Programa de Autoevaluación, Gestión y Mejora Continua de la Calidad en Mi Centro Educativo y que éste redunde al final del año en el reconocimiento por parte de la comunidad educativa de la calidad de educación que se imparte en mi institución educativa. En el mediano plazo apoyar y velar por el proyecto de vida de mis hijos para que no se desvíen de su vocación, no renuncien a sus sueños de salir a estudiar en el extranjero . Adquirir un departamento en una zona bonita y apacible y por último obtener la anhelada acreditación de mi Institución Educativa. En el largo plazo, sueño con ver a mis hijos convertidos en hombres y mujeres profesionales, recorriendo diversos países que ellos soñaron, trabajando para importantes empresas en las que puedan desenvolverse y ser valorados , reconocidos y bien remunerados, pero sobre todo felices amando lo que hacen en lo profesional y personal. En el plano afectivo me veo al lado de mi esposo, tranquilos en una casita donde haya bastante sol, disfrutando del fruto de nuestro trabajo y que mi querida institución educativa sea reconocida como la mejor en su nivel en mi distrito.